Un examen simple

Un examen médico puede ayudar a su proveedor de atención médica a entender la causa del problema. En algunos casos, la disfunción eréctil es la primera señal de otro problema de salud, por lo que es probable que su proveedor revise su estado de salud general. También es posible que le examine el pene, el escroto y los testículos. Informe a su proveedor de todos los medicamentos que esté tomando (con o sin receta), así como vitaminas, hierbas medicinales u otros suplementos.

Es posible que le hagan algunas pruebas

Su proveedor de atención médica podrá recomendarle todas o algunas de las siguientes pruebas:

• Análisis de sangre para medir los niveles de hormonas y lípidos (sustancias grasas en la sangre, como el colesterol). Otras pruebas para determinar si tiene diabetes o revisar el funcionamiento del hígado, los riñones y la próstata.

• Pruebas de flujo sanguíneo para comprobar si la sangre fluye bien por el pene.

• Un examen rectal para determinar si hay agrandamiento de la próstata. En estudios recientes se ha asociado el agrandamiento de la próstata con la disfunción eréctil.

• Otras pruebas ayudan a determinar si existen otras afecciones que reduzcan su capacidad para tener relaciones sexuales.

Su plan de tratamiento

Según lo que usted le diga y los resultados del examen, el proveedor de atención médica le recomendará un plan de tratamiento. Tal vez el primer paso sea probar los medicamentos para la disfunción eréctil, ya que son eficaces en la mayoría de los casos. Si estos medicamentos no le resultan útiles, el proveedor podrá sugerirle otros tipos de tratamiento. También es aconsejable que hable con su pareja para decidir cuáles serían las opciones más adecuadas para su relación. Parte del tratamiento puede consistir en enfrentar la causa de sus problemas de salud, como por ejemplo bajar el nivel de colesterol. También es posible que le recomienden terapia de conversación (asesoría psicológica) para hablar sobre los problemas emocionales relacionados con la disfunción eréctil.