Prostatitis bacteriana

La próstata forma parte del aparato reproductor de las personas de sexo masculino asignado al nacer. Esta glándula está situada justo debajo de la vejiga. La misma rodea la uretra. Este es el conducto por donde la orina y el semen salen del cuerpo. La prostatitis bacteriana es una infección en la próstata. Causa dolor e hinchazón en la próstata. Por lo general, el problema se presenta de repente. Este puede provocarle mucho malestar. Sin embargo, puede tratarse.

Corte transversal de una glándula prostática.
Cuando la próstata está sana, la orina fluye sin problemas a través de la uretra.
Corte transversal de una glándula prostática donde puede verse inflamación.
Cuando la próstata está inflamada, la uretra se estrecha y es más difícil que la orina la atraviese.

Causas y síntomas

La prostatitis bacteriana se produce a causa de una infección por gérmenes (bacterias). Esta infección provoca hinchazón de la próstata. Esto provoca presión sobre la uretra y la estrecha o bloquea. Los síntomas pueden ser graves y aparecer de repente. Pueden incluir los siguientes:

  • Fiebre y escalofríos

  • Dolor en la parte baja de la espalda

  • Micción frecuente

  • Dolor al orinar

  • Una salida de orina con menos fuerza

  • Necesidad de hacer fuerza para orinar

  • Incapacidad de orinar

Tratamiento

La infección se trata con antibióticos. Tome el medicamento hasta que se termine, incluso si comienza a sentirse mejor. Si no lo hace, es posible que la infección regrese. De esta manera, puede ser más difícil tratarla. También es posible que su proveedor de atención médica le sugiera otro tipo de cuidados. Estos pueden incluir descanso y beber más líquidos. Siga todas las instrucciones que reciba.

Prostatitis bacteriana crónica

La prostatitis puede convertirse en un problema de largo plazo (crónico). En ese caso, la próstata permanece hinchada e inflamada a pesar del tratamiento con antibióticos. Una de las posibles causas es la repetición de las infecciones que no se curaron del todo. Los síntomas incluyen dolor y ardor al orinar y necesidad de orinar con frecuencia. También puede provocar dolor en la parte inferior del abdomen o la espalda. Si presenta este problema, su proveedor de atención médica hablará con usted sobre un plan de tratamiento. El tratamiento suele consistir en tomar antibióticos durante 6 a 12 semanas.

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